23 de marzo de 2011

La última chapuza

Agapito se va superando y le da por contratar a un jugador sin pagarle los derechos de formación a su equipo de origen. No es una cuantía grande comparada con la que manejan los equipos de fútbol, pero siendo que estamos más secos que la mojama, Agapito ha tenido una nueva idea: Que no juegue. 

Otra chapuza más y van... Es lo que hay sin un plan deportivo y... bueno, sin tener ni puta idea.



Extraído de: http://www.elperiodicodearagon.com/noticias/noticia.asp?pkid=657118

La última chapuza

Agapito busca rescindir el contrato de Estrada porque tendría que pagar 580.000 euros para que jugara.

23/03/2011 A. RAMÍREZ 

Agapito Iglesias, presidente y accionista mayoritario del Real Zaragoza, pretende romper ahora el contrato firmado el pasado mes de febrero con el costarricense Diego Estrada, internacional sub-21 con su país y que iba a jugar inicialmente con el Zaragoza B, por considerar que el representante del futbolista no le avisó al formalizar el correspondiente acuerdo de que para ficharlo debía pagar obligatoriamente sus derechos de formación a pesar de encontrarse en libertad por haber finalizado el compromiso con su anterior club. Ese es el verdadero motivo de que Estrada no haya debutado todavía con el filial zaragocista en Tercera División. Si en algún momento llegara a hacerlo, el Real Zaragoza debería pagar una cifra que ronda los 580.000 euros al Alajuelense de la Primera División de Costa Rica, donde militaba anteriormente el mediapunta zurdo en su país. Las negociaciones para el fichaje de Diego Estrada fueron realizadas directamente por el propio Agapito. 

"Al ser un jugador libre nosotros no teníamos nada que ver con el pase internacional de Diego. Lo que hicimos fue ponernos en contacto con la Federación Costarricense de Fútbol y el pase fue enviado al Real Zaragoza, por eso el pase está en España. A partir de ahí todo lo que hicimos fue pedir los derechos de formación sobre el futbolista", afirmaba ayer Raúl Pinto, presidente del Alajuelense, en declaraciones realizadas al diario costarricense Al Día. Además, Pinto añadía: "Nosotros lo único que hicimos es solicitar los derechos de formación del jugador y eso no le impide a nadie jugar. Lo que todavía no ha hecho el Zaragoza hasta ahora es cancelarnos esa cifra". 

Y, salvo que haya un cambio de planes muy grande o de que se pueda entablar algún tipo de negociación con el Alajuelense para no pagar nada o una cifra muy baja por los derechos de formación del futbolista, Agapito Iglesias no tiene previsto que Diego Estrada juegue con el Zaragoza B a pesar de tener firmado contrato. Inicialmente, desde el Real Zaragoza, se aseguró que Estrada no podía alinearse con el Zaragoza B por no contar todavía con la documentación en regla y que existía incluso una laguna legal que podía impedirle ser inscrito con el filial zaragocista por ser extranjero, pero ahora, tras haber sido solucionados todos esos detalles burocráticos, todo se reduce a que no puede jugar por negarse Agapito a pagar sus derechos de formación. 

ENTRENAR SIN JUGAR 
Mientras tanto, el internacional costarricense (ha llegado incluso a debutar ya con la selección absoluta de su país) sigue entrenándose con total normalidad con el Zaragoza B, pero sin jugar. Diego Estrada pregunta habitualmente por su situación a las personas del Real Zaragoza que tiene más cercanas, pero hasta ahora no ha recibido ninguna respuesta para saber a qué atenerse. Estrada (Alajuela, 25 de mayo de 1989) destacó en el Mundial sub-20 disputado en Egipto en el año 2009. En enero, antes de fichar por el Real Zaragoza, estuvo a punto de firmar contrato con el Polonia-Varsovia en el mercado invernal, pero cuando apareció la posibilidad de recalar en el club aragonés prefirió cambiar de destino.
La intención inicial de Agapito era que Diego Estrada jugara esta temporada con el Zaragoza B, en Tercera, y que en verano hiciera la pretemporada con el primer equipo para tratar de convencer a los técnicos de que estaba capacitado para quedarse en la primera plantilla. En caso contrario se barajaría la opción de cederlo. Pero ahora es posible que no llegué ni a jugar con el filial.